Los trastornos autoinmunes ocurren cuando el sistema inmunológico pierde la capacidad de identificar la diferencia entre las sustancias nocivas como bacterias, hongos, virus e incluso células cancerosas llamadas antígenos, y las sustancias sanas del cuerpo. En consecuencia de esto, el cuerpo comienza a atacar los tejidos sanos que normalmente ignoraría. Las razones de por qué el sistema inmunológico pierde esta capacidad es aún desconocida. Este trastorno conduce a otros problemas de salud, incluyendo la diabetes tipo I, esclerosis múltiple y esclerosis lateral amiotrófica.
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA) es un tipo de trastorno autoinmunitario. También se la conoce como la enfermedad de Lou Gehrig en los Estados Unidos, en honor a un famoso jugador de béisbol de los Yankees de Nueva York cuya lucha contra la esclerosis lateral amiotrófica trajo la conciencia nacional sobre este trastorno autoinmunitario. La ELA es un trastorno neurológico en el que la capacidad de comunicación entre las células nerviosas del cerebro, la médula espinal y los músculos disminuye progresivamente y finalmente conduce a la muerte.
Esta enfermedad afecta la capacidad de realizar movimientos voluntarios. Las señales que el cerebro envía para el movimiento se llaman neuronas motoras.
Cuando las neuronas motoras mueren, la capacidad de iniciar y controlar los movimientos del cuerpo ya no es posible, lo que conduce a la parálisis. La enfermedad de Lou Gehrig o ELA afecta los movimientos de las extremidades, especialmente los brazos y las piernas, el habla, la deglución e incluso la respiración, cuando los músculos dejan de recibir señales, los músculos comienzan a encogerse y pierden toda capacidad para funcionar o moverse.
La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad indolora. No afecta a los sentidos ni a la capacidad de pensar o procesar pensamientos.